Un puzzle al que le faltan piezas

No me imagino la vida sin vosotros. 

Cuando eres pequeño no te imaginas que te vas a sentir solo nunca, vives en la inopia, en la dulce inocencia de que todos te revuelvan el pelo y te miren con nostalgia viendo en ti el niño que llevan dentro y que algún día fueron. Pero creces, creces y te das cuenta de que aquello que de pequeño pensabas que era impensable, sentirte solo, esta ocurriendo, por h o por b te sientes solo, SOLÍSIMO, sientes un vacío en tu interior y entonces es cuando el corazón te duele, cuando no lloras porque no te quedan lágrimas. 

Y ahí es donde aparecéis vosotros, siempre dispuestos a sacarme una sonrisa, siempre dispuestos a no solo ayudarme a caminar, sino dispuestos a llevarme en brazos si fuere necesario, con vuestras palabras, con vuestros te quiero, con cada gesto, cada insulto amistoso, cada tontería que hacéis  o que no hacéis  cada defectillo, cada peleilla, cada pequeño detalle de vosotros que adorna mi vida me recuerda que no estoy sola, que el mundo no es malo y cruel como por un momento piensas, que no estas solo.

Y es que no soy capaz de imaginarme un futuro en el que no esteis, ni recuerdo cuando no estabais, soy incapaz de pensar que un día no habrá más soles ni más lunas, que un día no habrá mas banderas alemanas, que un día miraré al futuro y no os veré en mi vida. Me niego a pensar así. Quiero romper las barreras de la distancia y del tiempo, quiero recordar siempre cada sonrisa y cada lágrima, quiero despertarme cada día y que cada detalle me recuerde a vosotros.

Porque la sola idea de una vida sin vosotros hace que mi corazón duela, porque no me da miedo caerme si estáis conmigo, porque daría mi vida solo por veros sonreír.

Y ES QUE SIN VOSOTROS

SOY UN PUZZLE AL QUE LE FALTAN PIEZAS